Conociendo, [libre]

Habia observado de reojo lo que habia hecho Lio. Ahora entendia de donde su mote perfectamente. Vi como empezaban a pelearse y negué con la cabeza, sonriendo, al tiempo que escuchaba a Liesel, ante lo que decia rei levemente.
-¿Tendrias que estar ahi? -pregunté, señalando con la cabeza a los chicos.

-Supuestamente-dije sonriendo-. Pero hoy no tengo ganas además están ellos muy bien así-dije mirando como se peleaban.
¿como los chicos podian armarlo tanto por un golpecito en la espalda? se oyó el desenvainar de espaldas puse los ojos en blanco.
-Anda vamos-dije entrando en el interior,queria subir a los torreones.

Dirigí una mirada hacia los chicos al escuchar sus palabras.
-¿Como pueden ser tan exagerados? -comenté, algo divertida.
Al escuchar sus palabras la segui hacia el interior. Mientras caminabamos miraba todo a mi alrededor, me hubiera gustado visitar cada una de las habitaciones, pasar por cada uno de los pasillos... pero parecia que Lio se dirigia un lugar en concreto y no dije nada.

Subimos todas las escaleras hasta llegar a los balcones-terrazas-torres.
Sonreí asomandome por la balaustrada.
-Desde aqui estan las mejores vistas de Vanissar...bueno es mi opinion-dije mientras invitaba a Lune a acercarse.

Me habia quedado parada en la puerta de la torre, mirando al horizonte y a los tres soles. Me acerqué a donde estaba Lio al escuchar sus palabras. Dirigí mi mirada hacia lo que habia abajo y mas allá, asomandome como ella. Me quedé fascinada por lo que veia, se podia ver toda la ciudad, bañada por la luz de los tres soles.
-Estoy de acuerdo contigo -asentí-. Es precioso.

Sonreí porque le hubiese gustado y me senté en la balaustrada.
-Es mi lugar favorito-sonreí- de dia o de noche, da igual pero observas que es lo que hacen los habitantes de Vanissar,sus actividades...-me encogí de hombros-.No sé, la rutina de una ciudad... pero ellos no saben que los ves-sonreí- eso suele ser lo mas divertido.

Apoyé mis brazos en la balaustrada, escuchando como hablaba del lugar. Sonreí ante lo ultimo que dijo.
-Yo todavia no puedo decir que es mi lugar favorito -comenté-. Quizá todo Idhun -añadi, aunque exagerando un poco.
Todavia me faltaba mucho que conocer, mucho que viajar. De echo, esperaba dirigirme pronto hacia Alis Lithban, sabia que aquel lugar me encantaria.

Sonreí por lo que dijo.
-Yo la verdad no puedo opinar demasiado nunca he salido de este reino-comenté mordiendome el dedo indice de la mano derecha, vaya mania, no me comia las uñas pero si me mordía los dedos-.Pero seguro que tú verás muchos sitios-sonreí.

Escuché lo que decia, aunque sin mirarla, porque mi vista estaba fija en la ciudad que se veia desde alli.
-Eso espero -susurré-. Mis padres -continue, refiriendome a los tres- viajaron por todo Idhun, y me han contado todo... tengo ganas de verlo con mis propios ojos -acabé.

Sonreí cuando dijo que sus padre recorrieron toda Idhún ya me gustaría a mi, no había visto el mar ni el puerto ni ningun otro reino.... Vanissar era mi prision ahora que lo pensaba...pero esta prisión me gustaba
-Pues espero que puedas ver todo Idhún y ya me contarás-sonreí

Sonreí ante lo que dijo y levanté la cabeza para mirarla.
-¿Y no te gustaria verlo por ti misma? -pregunté.

-Por supuesto que si-dije sonriendo y la miré-.Pero tengo que terminar antes mi formación y... dudo que pudiese viajar por todos esos sitios me moriría de hambre y me perdería-dije siendo muy objetiva,venga si me dedicaba a robar un misero bollo de pan.

La miré por lo que dijo. No habia pensado precisamente en eso, pero no lo veia un problema, cuando le decia a mis padres que podia cuidarme sola, me referia a siempre y todo lo que necesitara. Era lo bueno de ser hija de un hombre como Kirtash.
-Si quieres hacerlo, algun dia lo haras -corroboré, asintiendo, y dirigiendo mi mirada al cierlo.

-Algún día-asentí.
Y miré al horizonte sonriendo.
-Algún día dejaré de ser una inculta de la vida-me reí-. Por ahora la vida se está comportando bien conmigo, quien sabe en un futuro.

Al escuchar sus palabras no pude evitar sonreir enigmaticamente.
-Eso es lo que yo pienso muchas veces. He tenido suerte en la vida, empezando porque sigo viva -reí-, pero tanta suerte se puede terminar.
No es que no hubiera pasado malos momentos, como todas las personas, pero en conjunto mi vida era tal y como la queria.

Suspiré por lo que dijo.
-Puede que si o puede que no, depende de la jugada de los dioses-comenté utilizando mi mano a modo de visera para mirar hacia el horizonte
Yo era una persona más que pensaba que eramos peones de los dioses y daba igual lo que hiciesemos porque tendria que suceder lo que ellos habian dictado.
Puse los dos dedos sobre la roca divertida e hice que una chispita de fuego saltase entre ellos dos cuando separaba los dedos y cuando los juntaba desaparecía, pero era para no aburrirme.

Al decir aquello asentí. Por la experiencia de mis padres sabia que aunque no lo supieramos haciamos los que los dioses querian que hicieramos.
-¿Ha habido otra profecia? -le pregunté de repente.
Vi lo que hacia cons sus dedos sobre la roca. Levanté rapidamente la mirada para mirarla a la cara.
-¿Eres maga? -le pregunté.

Escuché lo que preguntó.
-No creo que no, aunque quien sabe si habrá-dije volviendo a abrir y cerrar los dedos, paré y alcé la cabeza para mirarla ante su pregunta me ecogí de hombros-.Supongo que sí
Lo era pero no estaba aprovechando mi poder

Al escuchar sus respuestas, ante la primera asenti lentamente y ante la segunda la miré.
-No te has puesto a estudiar la magia, ¿verdad? -dije.

Negué con la cabeza.
-No tengo tiempo estoy con Nurgon-contesté, no iba a sacar tiempo de entrenar y de ponerme a estudiar sobretodo porque me tendria que ir a una de las torres de hechiceria.

Asentí lentamente.
-Lo entiendo. No todo el mundo al que se le concede la magia está dispuesto a dejarlo todo para ir a una torre y todo eso -comenté encogiendome de hombros-. Yo soy semimaga -le dije.

Sonreí al escuchar que me comprendía, ella era semimaga.
-Pero seguro que sabes utilizar tu poder mejor que yo-dije, yo la verdad no sabia hacer demasiado.. por no decir nada.
Estaba mas pendiente de mi espada que de la magia claro estaba

-Bueno... intento no desaprovecharlo... pero tampoco tenia nada mejor que hacer -dije, encogiendome de hombros.
Para mi ella habia tenido que elegir... y al parecer aquello le gustaba, era normal que no hubiera querido irse a una de las torres de hechiceria.

Asentíi con la cabeza.
-A lo mejor algun dia.. vaya a alguna torre-dije encogiendome de hombros-.A lo mejor cuando termine aquí... porque me parece que no deberia desaprovechar esto-comenté torciendo los labios.

La miré asintiendo una vez lentamente, y luego ladeé la cabeza.
-No seria mala idea. Yo veo la magia ocmo un don, un don que puede ayudarte mucho -comenté.